Dos equipos conformados por alumnos de las áreas comerciales e industriales de los liceos corporativos presentaron y probaron las tricicletas eléctricas diseñadas y construidas por ellos, en pruebas desarrolladas en las comunas de Concepción, Tomé y Coronel.
Desde junio, dos grupos de 20 estudiantes cada uno, trabajaron en el diseño y construcción de tricicletas eléctricas con las cuales demostraron sus habilidades y capacidad de trabajar colaborativamente.
El equipo Newen, conformado por alumnos del Liceo Industrial de Tomé y del Liceo Comercial Femenino de Concepción; y el equipo Power Corp, integrado por estudiantes del Liceo Comercial Enrique Oyarzún Mondaca, Liceo Industrial de Concepción y Liceo Industrial Fundación Federico Schwager, se dieron cita en la Plaza de Armas de Tomé, en el Parque Bicentenario de Concepción y en el Parque Cristo Redentor de Coronel.
En cada uno de los encuentros realizaron pruebas de regularidad abiertas al público, en las que completaron 3 rondas de 10 vueltas cada una, conducidas por tres pilotos diferentes.
Kathy Herrera, del Liceo Comercial Femenino de Concepción, cumplió esta función, siendo seleccionada por su equipo en una prueba previa. “Hubo una selección de estudiantes, en la que se midió la regularidad y se eligió a los que obtuvieron mejores resultados, en mi caso fui la ganadora en mi liceo, así que fui seleccionada como piloto para estos tres días de competencia”, declaró.
Su compañero, Mitchell Jara, del Liceo Industrial de Tomé, en tanto, reveló como se organizaron para construir la tricicleta. “Participaron alumnos de Construcciones Metálicas, Electricidad y Mecánica Automotriz, por lo que tuvimos que trabajar en equipo y saber compartir las distintas tareas”, indicó, agregando que se basaron un diseño elaborado por las alumnas de Liceo INCOFE.
En el bando contrario, Juan Moreno, del Liceo Industrial de Concepción, destacó la iniciativa por tanto pudieron trabajar con materiales reciclados, poniendo en práctica sus conocimientos técnicos. “Yo estudio Mecánica Automotriz y me sirvió para aprender sobre las nuevas tecnologías para mover un vehículo sin combustible, en este caso a través de baterías que alimentan un motor eléctrico que va conectado junto con el eje trasero”, explicó.
Esta competencia de la Corporación de Estudio buscó integrar las distintas especialidades que imparten sus establecimientos, potenciando el desarrollo de habilidades técnicas y estimulando la capacidad creativa y de trabajo conjunto de los alumnos, en un proyecto que les demuestra que son capaces de construir un medio de transporte útil y que no emite contaminantes al medio ambiente.